La tasa de delitos de odio violentos en Estados Unidos en 2019 (1,0 delitos de odio por cada 1.000 personas de 12 años o más) no difirió significativamente de la tasa de 2005 (0,8 ilícitos por 1.000), según publica el Bureau of Justice Statistics, basándose en los datos reportados por las víctimas en la Encuesta nacional de victimización de delitos (NCVS). Durante el periodo de quince años, del 2005 al 2019, la tasa de victimizaciones de delitos de odio violentos fluctuó entre el 0,6 y el 1,1 por cada 1.000.

Por término medio, los residentes de Estados Unidos experimentaron aproximadamente 246.900 victimizaciones de delitos de odio anuales entre los citados años 2005 y 2019. El número de delitos de odio osciló entre 173.600 y 305.390 durante ese periodo. Asimismo, el número de victimizaciones totales, violentas y de delitos de odio patrimonial no varió significativamente de 2005 a 2019.
En general, las victimizaciones de delitos de odio representaron el 1,6% de todas las victimizaciones no mortales en 2019, frente al 0,9% de 2005. Las víctimas indicaron que casi dos tercios (62%) de los delitos de odio durante ese periodo fueron agresiones simples.
Durante el periodo de cinco años estudiado, se estima que el 59% de las victimizaciones de delitos de odio violentos reportadas por las víctimas estuvieron motivadas por un sesgo contra su raza, etnia u origen nacional. Esta fue la motivación más frecuentemente denunciada por un delito de odio violento. En casi una cuarta parte de las victimizaciones de este tipo de delito, las víctimas creían que eran objetivos a causa del sesgo contra su género (24%), contra personas o grupos a los que estaban asociados (23%) o contra su orientación sexual (20%). Asimismo, se creía que aproximadamente 1 de cada 10 victimizaciones de delitos de odio violentos estaban motivadas por un sesgo contra la discapacidad de la víctima (11%) o la religión (9%).
Entre los años 2010 y 2019, el número de delitos de odio registrados por las fuerzas del orden aumentó un 10% (de 6.628 a 7.314 incidentes), según el Programa de estadísticas sobre delitos de odio (HCSP) del FBI. En comparación, el volumen total de delitos registrados por los cuerpos de seguridad (incluyendo incidentes de odio y de incendios) disminuyó un 22% durante aquel periodo de diez años.
Los recuentos registrados por las fuerzas del orden y los reportados por las víctimas difieren porque los datos de la NCVS y el HCSP se recogieron a través de métodos distintos y las víctimas a menudo no se presentaron a la policía. HCSP y NCVS son las principales fuentes de información anual sobre crímenes de odio en Estados Unidos y utilizan la definición establecida por la Hate Crime Statistics Act de 1990.
De manera similar a la motivación de los delitos de odio reportados en la NCVS, la mayoría de la práctica (aproximadamente el 54%) de los delitos de odio registrados por las fuerzas del orden de 2010 a 2019 representaron el sesgo de raza, etnia o ascendencia. El 49% de estos incidentes fueron motivados por un sesgo antinegro o antiafroamericano. Durante este mismo periodo de tiempo, las fuerzas del orden registraron aumentos en el número de víctimas de delitos de odio de negros o afroamericanos (de 2.201 a 2.391 víctimas), asiáticos (de 136 a 215) y de origen árabe (de 48 a 126).
_____
Aquest apunt en català / This post in English / Post en français